sábado, 13 de noviembre de 2010

Palpitaciones, arritmias, taquicardias.

Actualmente y de forma alarmantemente creciente van aumentando los problemas o enfermedades cardiacas, (parece ser que el estado del bienestar… no lo es tanto). Vamos a estudiarlo desde el prisma de las flores.
En la medicina china se distingue claramente el corazón-órgano y el corazón-emociones, claro está, un estado alterado de emociones puede afectar al corazón-órgano pero también al resto del cuerpo y del espíritu; y en astrología el corazón se relaciona con el sol, con leo, con la voluntad (prerrogativa divina) y, en su defecto, con el orgullo o su extremo… la soberbia: el defecto que, según dicen los maestros, es el más difícil de erradicar pues nunca se le reconoce. Está claro que, normalmente, queremos que prevalezca nuestro deseo, o nuestro ego absolutamente por encima de lo que nos trae las circunstancias o el destino.
Por lo tanto, sería interesante observar las circunstancias con más perspectiva ( CRAB APPLE), pero, no cabe duda de que, en este caso, la flor “estrella” sería HOLLY por relacionarse con el amor universal y el “cuore” pero hay otras flores que, a no ser por su relación con el chakra cuarto no las podríamos identificar:
BEECH, si nos planteamos la vida solamente aceptando lo bueno que trae y rechazamos lo que “nos parece” más negativo iremos cerrando la sensibilidad hacia lo que nos rodea… comprimiendo el corazón. Sería una forma de no amar o de cerrarse a las experiencias que, precisamente nos van a enseñar las lecciones más importantes.
HONEYSUCKLE también se relaciona con palpitaciones o taquicardias porque, al vivir en el pasado estamos dejando de vivir el presente y dejando de crear el futuro: una especie de no-vida la cual conduce a un bloqueo en la comunicación y esta a un bloqueo… del corazón.
LARCH, si básicamente no confiamos en nuestro ser, iremos por la vida encogidos, con el plexo solar-abdomen totalmente contraído lo cual va a influir… en el corazón.
CHICORY, aunque también corresponde al amor, en este caso maternal, se relaciona con el segundo chakra el cual también se contrae y ¡de qué manera! si tratamos de retener, chantajear, manipular para obtener lo que queremos, si no aceptamos de buena manera lo que se presenta, si no soltamos lo que se ha de ir, esta actitud también contrae tremendamente el abdomen llegando, incluso, al corazón.
Estos son, solo, algunos ejemplos de cómo una actitud negativa puede conducir a una alteración orgánica. Desde luego que hay muchos más: ansiedad (agrimony), angustia vital (sweet chestnut), ¡las prisas! (impatiens), un ataque de pánico, presión medioambiental…. pero para encontrar el equilibrio, siempre podemos contar con nuestras inestimables colaboradoras, las flores.