sábado, 16 de noviembre de 2013

Chantaje emocional o te quiero cuando y como me conviene.



El doctor Bach repitió, muy a menudo, que lo más grave que podemos hacer es manipular la voluntad de los demás y lo segundo peor… dejar que nos la manipulen. En cambio, por regla general, en la mayoría de las relaciones funciona esta norma a la perfección y desde el estamento más alto de la sociedad hasta las capas más inferiores.

Cuando era pequeña tenía la feliz ilusión de que cuando se ama a una persona, ipso facto, se recibe el mismo tipo de sentimiento, pero la regla general es muy distinta, incluso algo que me sorprende, funciona mucho mejor lo de “cuanto más interesante me hago y menos caso te hago a ti, más pendiente estás de mi” o al revés “cuanto más agradable soy contigo, más derecho crees tener a que sea así ¡o más!”. Es decir, llegamos a un punto en las relaciones sociales que solamente llegan a funcionar en la medida de lo que aportan como “beneficio”.

De esta forma nos encontramos con hijos de hasta muy corta edad que manejan a los padres con la gorra, padres que manejan a los hijos de mil formas distintas para “llevarles por el buen camino”, ya no digamos nada en el tema sentimental-emocional-amoroso, amistades por intereses, etc….

Y lo peor es que todo este montaje está creado por los egos o tendencias inferiores trabajando con ferviente interés a espaldas del espíritu, de modo que el Ser auténtico, la esencia queda relegado a un pequeño rincón, olvidado de todos, es decir, nos convertimos en presa y completamente al margen de nosotros mismos…………………………………………………………………..

Y todo ¿por qué? ¡Por no atrevernos a ser nosotros mismos, a llevar la Verdad, la Libertad… el Amor hasta donde haga falta y hacer lo que sea necesario para que florezcan en su más espléndida naturaleza! Es decir, ser el Ser, lo que realmente Yo Soy.

Para que esto no ocurra o para tomar conciencia, vamos a ver qué flores nos ayudan:

CHICORY, la estrella por excelencia de la manipulación emocional o para desarrollar el Amor maternal universal (también válido para los padres).
HOLLY, por supuesto, para el Amor Universal o para erradicar el desamor en todas sus vertientes.
VINE, para la única visión sobre un tema y la cerrazón en perseguirla, o el dominio sobre una situación.
BEECH, cuando algo o alguien nos desagrada por alguna cuestión “aparente” y lo rechazamos de plano.
WATER VIOLET, porque somos tan autosuficientes que nos valemos y bastamos solos.
CHESTNUT BUD, cuando “pasamos” de aprender nuevas vivencias creyendo que ya lo sabemos todo.
AGRIMONY, para ser sinceros con nosotros mismos y no falsear las situaciones.

Como siempre, este es un ejemplo, porque podrían ser muchas más, dependiendo de cada persona. Incluso, cualquiera de ellas nos lleva siempre a la toma de conciencia.

Entonces, sería un muy buen ejercicio, en este tiempo prenavideño, empezar a practicar para desarrollar el Amor y vivir esta fiesta en su pleno sentido.